En una tarde de lluvia...

En una tarde de lluvia

Hay un aroma en mi mente…

Hay unos ruidos golpeándome y unas gotas húmedas a través de mis persianas…hoy voy a intentar escribir.

Inhalo…mi mente atraviesa lo normal…sale de todo parámetro y se decide ir a volar con mis pensamientos.

¿Es mucho pedir cerrar los ojos y trasladarte?

No solo a un lugar, sino a un tiempo, un momento...un aroma

Volver a esa mirada, a esa risa...esa única compañía que solo ustedes me pueden dar.

Necesito aparecer, oler esa tierra, esa brisa única de un océano puro...de mi casa.

Llegar ahí, único territorio de donde mis pensamientos nunca se han ido.

Sentarme en mi sillón, disputármelo con mi tata mientras tú nos miras con esas mejillas junticas,

Y en ese momento te ríes y nos dices “mi osito y mi palomita”.

Una vez escuché que el alma viaja más lento que nuestro cuerpo.

Bueno, la MIA sigue anclada en esa playa...en la vista de mi balcón,

En eso que llamamos hogar y en ustedes dos.

Hoy no puedo estar contigo tatico y el corazón me estalla a pedazos, a veces no se cuan fuerte uno puede ser.

Tantos años…casi una década ya. Él es casi un hombre, un hombre que me llama de “usted” y como culparlo?

Tanto tiempo y yo tan lejos, tantas cosas perdidas…pero algo voy a jurarte...mi alma nunca se separó de ti.

Simplemente hoy no quiero estar aquí, no quiero tener solamente una hoja y a mi eterna soledad acompañándome.

Quiero un abrazo, un silencio, una risa y también una historia…pero solo de ustedes…sangre de mi sangre.

Tan cansada de estar así, me desmorono, no aguanto una lágrima más, el vacío.

Te necesito mami, juro no soy esa roca que crees. Te necesité en la adolescencia y me duele no tenerte de mujer, si es que acaso ya me convertí en eso.

¿Como se puede explicar la soledad? Creo que no hay manera, es como una mezcla de dolor con vacío en tu diafragma.

Tal vez es cerrar los ojos y desear no tener más esta vida, o mirarte al espejo y desconocer tu mundo.

Los necesito, si. Los necesito acá y cada día que pasa me pregunto de donde sacaré las fuerzas para no mostrar mi dolor.

¿Seguiré por mucho tiempo imaginándote en cada rostro que veo?

Buscándote semejanzas, de creer que en algún momento podré recobrar aquello que con tantos años de separación cada vez arruino más.

No sé si lo que escribo, después de varios años que no compartía mis lágrimas contigo, que no me sentaba y te veía llena de gotas con la lapicera sobre ti

Y aún así siendo mi única compañía, no sé si algún  día te mostraré…pero sí te agradezco por estar y por dejar mi mente un poco más aliviada.

Ya que no solo quedó en mi cabeza la tortura dándome vueltas…ahora quedó sobre ti.